VOCES DE MATISSE

Y si duermo algún día que seas tú quien duerma conmigo. Te escucho en el sonido de las mariposas sobrevolando la oscura noche. SCDT

¡Me encanta esta potente canción del también poeta Mark Lanegan! Dios que letra...descanse en paz

VOCES DE MATISSE 

El temblor de una hueca llave en la boca

Abre al infinito
Metal de ojo oscuro
Fuego escarbado en el frío
Al guiño de una rosa en el vacío

Inexistente es el tacto

en la belleza que no se toca

¡Trázame entre tus palabras solo un beso!

¿Quién necesita aliento al sostener toda esta vida? ¡Si somos solo viento que vuela!

Mientras duermo, tu voz fantasmal me habla, voces de témpano  colapsan con fatigas mis visiones, susurros que me abren al gris del sol, sonidos pincelados de un Matisse

El líquido tórrido 

me habla

en la poesía que duerme

SCDT

SONRISAS DE VIDA MALSANA

Abrázame como los árboles a la niebla, sintiendo las islas de tus manos, tu frialdad agarrada en mis puños. Con el oxígeno escondido en mis pulmones, la vida nos fijará perversos recuerdos en su seco aire.

Estupro oscuro, oscura bendición. Erizado el bello de la serpiente, con la trivialidad de nuestro silencio compartido, con la felicidad en tu escotado diluvio.

don dumas

(Aún sé que todos mis fantasmas se llaman Baudelaire)

Los beneficios de la luna.
Les Bienfaits de la lune, Charles Baudelaire (1821-1867)

..."Y por esto, niña mimada, maldita y querida, estoy ahora tendido a tus pies, buscando en tu ser el reflejo de la terrible divinidad, de la fatídica madrina, de la nodriza envenenadora de todos los lunáticos."

Et c’est pour cela, maudite chère enfant gâtée, que je suis maintenant couché à tes pieds, cherchant dans toute ta personne le reflet de la redoutable Divinité, de la fatidique marraine, de la nourrice empoisonneuse de tous les lunatiques.

Charles Baudelaire (1821-1867)

EL FUEGO DE MIS PALABRAS

La incontinencia de mis palabras busca en los fuegos de la hoguera burlona
¡Observa la línea sinuosa de la sonrisa cuando se apaga!, el misterio renace con los silencios

en el río de los iguales
Su abrasiva silueta se transforma de mujer a crisálida, solo cuando la ciudad duerme,
solo en la indiferencia de la oscuridad
Dichosa oscuridad que nada prohíbe, mi dulce hermana, palpitando sangre en sus labios
Hermana cruel
Hermana cruel
Eres el rezo del amo
Me regalaste la flor salvaje, y yo armé tu grito,
y ahora las gárgolas sujetan en su mirada nuestro destino




don dumas