Déjame caer hasta donde no llegue el último latido
entre miedos de los únicos versos
tú eres esa danza en mi desiertotú eres todo mi desastre
plántagos de agónicabelleza
plántagos de agónica
El sol retumba en esta tierra,
abrasando los postizos horizontes,
frenando el alegre canto de las aves grises,
en su paraíso fundido con el ocaso del barro
Plágiame con este agónico paisaje de arenisca,
allí transitan mis pies de niebla
evitando turbas que me persiguen
que azotan con su mirada
Tal vez el mismo sonido hueco creciendo rebelde entre el afanado Lorca,
o en las verdes locuras de Whitman...atrás quedaron las visiones del joven Rimbaud
¡Aquellos que fulminaron huesos!
¡Santos lugares del deprecio!
Entre árboles, semillas, bosques ..duerme oculta la vecina ilusión
Crepitan sobre mis temblorosos ojos sensaciones cercadas,
arrimadas al odio, separadas del viento
donde me encierra el roble recuerdo
¡madre inhóspita!
Extráeme de esta endeble madera muerta
¿Acaso tuviera nombre este lugar?
Una ausencia, surge, enviudada en la soledad,
tintineo de tramas con su frondosa apatía:
ni un palmo de belleza asomado entre sus sombras
ni un palmo de angustia que pudiera arrastrarme hasta un viejo baile
Lugares como lunares, marcados con su aborrecible quietud
Nada allí respira si no es mi presencia
Ninguna respiración, el mundo deserta al sur de mi cabeza,
Nada allí respira si no es mi presencia
Ninguna respiración, el mundo deserta al sur de mi cabeza,
entre mis decrépitos ropajes (yo fui verde aquel día)
Y hoy,
quisiera ser un frugal eco en esta tormenta de parálisis
Pero soy bromo arrepentido, perdido, entre los límites del ruido,
Pero soy bromo arrepentido, perdido, entre los límites del ruido,
paladeando su sintético vacío adhiriéndose a mi paladar
Escucho
sus trágicos ronroneos, en la extensa pira del alma,
es el sonido de esa odiosa quietud, ¡escuchad!
sus trágicos ronroneos, en la extensa pira del alma,
es el sonido de esa odiosa quietud, ¡escuchad!
Sus negras gotas salpicando
vidriosos pasados
Es solo mi risa, tú no me reconoces
tan ausente este elocuente rostro del mar de los destinos
Manso llegué a esta mansa tierra
tan ausente este elocuente rostro del mar de los destinos
Manso llegué a esta mansa tierra
a sus apócrifos lugares
donde no se inventan las palabras,
aparejos de la muchedumbre
Juegan contra mí
malditos
mis propios pensamientos
don dumas
"Calladas sensaciones olvidan a los hijos de sórdidos burdeles amamantados de frágiles balanceos y equilibrios sobre lágrimas de grajos desprendidas de la oscura lluvia que arreció en los sombríos destinos de la infelicidad que nada calma si no es en el presuroso encaje de los ojos sobre el dichoso y amplio misterio de las desconcertantes palabras que están por venir hasta de corazones aterrados"
Me descubro ante tu poema, don Dumas. Me parece fascinante cómo se desliza esta oscuridad entre verso y verso. La inquietud, la vorágine de una mente que decae ante el vacío.
ResponderEliminarAsí lo he percibido.
Mil besitos para ti y feliz finde.
Hola Auroratris, gracias ante todo por tus amables palabras.
EliminarLa inquietud, los espacios lúgubres a los que nos lleva la mente, en ese grisáceo estado de ánimo que nos cuesta tanto reconocer o reconocernos.
Besoss
Tu poesía transgresora, tu "antipoesía" como he leído por ahí, hacen que leerte sea un viaje casi al cosmos de las palabras, viajamos de tu mano, desnudos, con el alma en vilo, buscando esa palabra que nos conecte con la emoción fugaz que pasa como un rayo para volvernos a sumergir en otra.
ResponderEliminarUna maravilla hecha poema, con tantas aristas que casi siendo un prisma perfecto proyecta todo su esplendor.
Besazo.
Hola Luna, en realidad me apropio de la antipoesía por mi incapacidad para crear poesía real...eso si, mis escritos intento hacerlos tan transgresores como aparento.
EliminarMe gusta el matiz que aportas definiendo las aristas, porque nada es unívoco en los versos,
Si nuestra poesía se entendiera como la claridad de la luz ¿alguien sería capaz de volar sobre las amplias riberas de la imaginación?
Madre mía como estoy hoy, jejeje
Muchos besoss
Intensidad define este poema!!!
ResponderEliminarTe sigo, besos
Hola Paula, muchísimas gracias por tu visita
EliminarUn placer
Besoss
Las fuerzas que se desatan dentro de la mente y nos hacen “ser o no ser” ,
ResponderEliminardanzar de mil maneras diferentes en las oscuridades y desiertos del propio destino
emprender distintos viajes, buscar y encontrar la belleza, aferrarnos, sucumbir frente al mundo que se muestra hostil, dar batalla y renacer, dejarnos caer, continuar ilusamente los caminos que vuelven a conducirnos a la angustia y la soledad.. encontrar la paz en sitios en donde no hay un espacio para nuestro cuerpo , mente y corazón..una verdadera canción desesperada
Don Dumas tu poema quiebra la respiración de cualquiera!!
Solo puedo decirte FANTASTICO.
Besosssss y excelente finde!!!
Hola Eli, es cierto que en muchos de mis poemas va implícita esa atmósfera ( lúgubre que comentaba a Auroratris) que atenaza aún en décimas de segundo, y bloquean o desesperan, o inquietan. Ahí es donde descubrimos la insignificancia...la mía
EliminarFantástico es tu comentario!!
Besoss
Excelente Don Dumas, te sigo desde ya.
ResponderEliminarBesos al alma.
Gracias Paula
EliminarBesoss!
Entre tus poemas fundacionales de tu voz poética Don. Para infinitas relecturas...
ResponderEliminarAbrazo hasta vos. De corazón.
Hola Carlos,
EliminarSi fuera mujer te diría que esta poesía ha sido como un parto...uff, todo poderosa, jaja
Gracias amigo
Abrazos!!
Besoss
Intenso poema amigo Don Dumas, me quedo perdida entre tus letras. Saludos.
ResponderEliminarHola Sandra, es un encanto ser intenso
EliminarGraciaaas
SAludos
Tienes un interior inmenso, don Dumas, mágico, lleno de esa luz oscura que me maravilla. Tus versos, siempre te lo digo, son esa calma en el río de Caronte.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Hola Mag, Me hace ilusión tu comentario, porque de la escritura del desasosiego , de esas sombras errantes que genialmente describes con Caronte, puede surgir la lectura de la calma
EliminarBesoss
Asumo estos versos como un fresco de la existencia, poblada de avatares, donde uno se puede quedar sin voz, sin eco a las palabras-Gracias por pasar por mi blog. Un abrazo.
ResponderEliminarCarlos
Hola Carlos, me ha encantado tu profundo comentario, poético y bello. Nos podríamos quedar sin voz, cierto, pero no sin palabras...muero
EliminarGracias
Un abrazo Carlos
que bonito escribes
ResponderEliminarHOla Mucha, gracias por ser tu generosidad conmigo.
EliminarMaestro ...
ResponderEliminarUn honor siempre tu presencia, amigo
EliminarAbrazos
Pues, como siempre, es un poema espectacular...
ResponderEliminarLo he leído varias veces. La primera vez fue suficiente para saberlo bello, pero muy corta para arañar verdad o sumergirme en él.
Y tras varias lecturas, desde luego no sé si he rescatado tu verdad, pero me ha llevado a la mía: hambre de poesía en el sentido más amplio. Búsqueda, éxito, fracaso. Tensión entre el cronismo inane y la comunión con el entorno, la ausencia y la aportación, la significancia y la contingencia. También en uno mismo.
Y, sobre todo y ante todo, he disfrutado mucho la lectura =)
Un abrazo Don Dumas
Hola Licaón
EliminarTu primera lectura te engañó, no sé ni puedo hacer poemas bellos, jaja, y soy consciente. La belleza es un hechizo que duerme los sentidos, amo las palabras, cada una de ellas, el universo que encierran, el infinito significado de sus existencias...las palabras y ninguna tiene una verdad, pues todas son verdades, el significado y el sentido es un nido que reposa en nuestra garganta, en las palmas de nuestra mano, y en nuestro vilipendiado pensamiento.
Amo la poesía porque ella a mí no me ama. ¿Existirá mayor rebeldía?
Gracias amigo
Un abrazo!
Ahhh, que se me olvidó decirte Licaón, mira como tacho la belleza en este poema...un abrazo
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